La Ruta de los Molinos es un trazado por los molinos y cortijos que se sitúan por los alrededores de Fuente Palmera y sus aldeas, dos rutas estratégicamente escogidas que enlazan quince de los monumentos rurales que forman parte del patrimonio histórico de la zona. Se trata de una iniciativa del ayuntamiento de la Colonia de Fuente Palmera con la que se pretende dar a conocer uno de los principales atractivos turísticos de la localidad.
Fuente Palmera, al igual que otros tantos pueblos vecinos de la campiña del Guadalquivir, fue fundada por Carlos III en el Siglo XVIII como colonia de repoblación, y cuenta, por lo tanto, con escaso patrimonio monumental histórico reseñable exceptuando sus edificios religiosos y fuentes. Son estas haciendas, molinos, almazaras, cortijos, viviendas rurales las que representan uno de los mayores atractivos turísticos debido a su historia más dilatada, de ahí que se justifique el esfuerzo en ponerlos en valor por parte de las entidades locales.
Estos gigantes de la campiña cordobesa, construidos a principios del siglo XX e incluso antes (algunos en el siglo XVI ), surgieron a partir de la necesidad de molienda de la aceituna; el paisaje hace algunas décadas difería del actual puesto que el campo estaba cubierto de olivos, con lo que los molinos vinieron a satisfacer la demanda de almazaras y centros de tratamiento de su fruto. El último intendente de las Nuevas Poblaciones Pedro Polo Alcocer, tal y como relata una de las publicaciones del cronista local D. Francisco Tubío, potenció la plantación de olivos, viñas y árboles frutales en la zona mediante una orden real, plantándose miles de plantas de olivar en la primera mitad del siglo XIX y en el último tercio del mismo.
Actualmente pocos son los molinos que conservan las piedras, vigas, tinajas y demás elementos de trabajo; algunos de ellos han sido restaurados y se les ha dado uso como viviendas rurales o almazaras de nueva construcción, otros son testigos de los estragos del tiempo y se encuentran en peor estado de conservación. No obstante, todos son de alto interés, puesto que en mayor o menor medida encierran parte de la historia local y son la huella de aquellos primeros colonos que vivieron y trabajaron en torno a estos colosos del paisaje.
Se trata de dos rutas bien diferenciadas: la primera más cercana a Fuente Palmera recorre los molinos de la parte norte de La Colonia, mientras que la segunda, sita más al sur, recorre los singulares edificios próximos a Cañada del Rabadán y El Villar. Ambas han sido diseñadas con la idea de poder realizarlas en un día cada una y son de dificultad baja puesto que discurren por sendas relativamente diáfanas y en buen estado, con lo que además se pueden llevar a cabo tanto a pie, como en bicicleta o incluso a caballo.
Adicionalmente, el cronista local D. Francisco Tubío Adame, propuso en la segunda edición de su libro La Ruta de los Molinos – un viaje a través de nuestra historia una tercera ruta al norte de las anteriores y que incluía tres nuevos molinos históricos situados en suelo colono.
Completar estas sendas supone meterse en la piel de aquellos colonos de antaño, divisar el paisaje que, algo cambiado hoy, pudieron disfrutar entonces, y complacerse de los edificios de molienda que lejos de ser meras almazaras eran además viviendas donde se sucedieron incontables historias cotidianas y no tan cotidianas.
Ruta I
Ruta situada entre las localidades de Fuente Palmera, Villalón, La Herrería, La Peñalosa y La Ventilla, de unos 10 km de longitud atravesando el enclave de seis molinos que moran en suelo colono. Trazado regular y bastante rectilíneo que recorre la periferia de las localidades cercanas por carretera y caminos. Los cortijos de esta zona, que se cuentan en menor número que los de la segunda ruta, son todos de gran singularidad por su arquitectura y por haber servido de vivienda habitual para personajes influyentes en la vida pública de las localidades cercanas.
S. Roque
Molino San Roque. Datado en el Siglo XIX este peculiar molino cuenta con dos grandes torres paralelas, algo poco habitual en la zona, pero característico en otras como Adamuz o Montoro.
Timoteo
Molino Timoteo. Molino de estructura singular rodeado de palmeras. Muy cercano a la población de Fuente Palmera y en buen estado.
Santa Magdalena
Molino de Santa Magdalena. Restaurado y reutilizado como residencia de mayores, esta antigua almazara contaba con dos prensas de hierro, una de usillo y otra de torre.
Chacón
Molino Chacón. En 1840 se erigió esta edificación en la que llegó a instalarse una fábrica de orujo. Cuenta con una peculiar chimenea visible desde lejos.
Sastre
Molino del Sastre. Muy transformado desde su creación en 1894 este molino, en el que se pueden apreciar dos grandes tinajas en el exterior, no posee torre de molienda.
Agustinos
Molino de los Agustinos. Último molino de la ruta, cercano a la población La Ventilla. Actualmente en actividad como recinto ganadero. Entrada a la zona rural donde empieza la siguiente ruta.
Ruta II
La segunda ruta comprende molinos situados entre Cañada del Rabadán, El Villar, La Ventilla y Fuente Palmera, en tierras ecijanas la mayoría de ellos. Su longitud es de unos 17 km y su trazado más irregular que la primera ruta, aunque también de dificultad baja. En este caso el viandante se encontrará con los cortijos envueltos en un paisaje más agreste, alejado de los núcleos poblacionales, pudiendo ver los distintos cultivos tanto de secano como de regadío de la zona, los continuos olivares y las viejas casillas que pululan desafiando al tiempo.
Cantalapiedra
Molino de Cantalapiedra. Primer molino de la ruta segunda, con torre y varias estancias interiores, entre ellas una capilla. Semirestaurado y en buen estado de conservación.
Eslava
Molino Eslava. Molino con torre divisable a gran distancia debido a la ausencia de olivar u otra arboleda en sus proximidades.
Victorias
Molino de las Victorias. De bella arquitectura y destacable torre de molienda, este edificio albergó en sus tiempos a varias familias. Cuenta con una bonita decoración aunque no se encuentra en un buen estado de conservación.
La Palma
Molino de la Palma. Reconvertido en casa rural, esta antigua hacienda del Siglo XVII estuvo rodeada en su día de extensos olivares cuyo fruto molían las personas que se hospedaban en ella. Muy buen estado de conservación y restauración llevada a cabo respetando los elementos originales.
Mármol
Molino del Mármol. De interés arquitectónico alto, y con torre de molino. En buen estado de conservación y con arboleda propia en su periferia.
Mesa
Molino de Mesa. Situado en el Paraje Bajo de Mesa en tierras ecijanas, este molino está situado cerca de la antigua Regaña.
Murcia
Molino Murcia. Cercano al Molino Murcia encontramos este molino que se preserva en buen estado de conservación y divisable desde larga distancia.
El Puntal
Molino el Puntal. Atravesando Cañada del Rabadán y algo más alejado de los anteriores encontramos el Molino el Puntal que aún conserva la viga y las piedras de molienda, siendo por tanto uno de los más interesantes.
Sotomelero
Molino Sotomelero. Edificio de renovada actividad, restaurado y reutilizado para celebraciones varias. Acabamos la ruta con una construcción que cuenta con zonas ajardinadas, alojamiento y salones de actos. Sin duda uno de los más históricos, puesto que los últimos datos obtenidos lo datan en el siglo XVI.
Ruta III
Existe una tercera ruta que discurre al norte de las anteriores, en la línea que une Peñalosa y La Herrería y continuando en dirección Posadas. Engloba tres molinos históricos en una ruta de aproximadamente 5 km que discurre por carretera y caminos rurales.
Calcetas
Molino Calcetas. Antiguo caserío de olivar al norte del término de Fuente Palmera, hoy rodeado de tierras de sembradura regables que antes fueron olivares. Albergó un molino industrial de mecanismo hidráulico, desmantelado, si bien permanece la nave de la almazara.
San Francisco
Molino San Francisco. Encontramos este molino pasando por el camino de los Quiñones, atravesando el Arroyo del Horcajo; en la última calle al norte de la población de la Peñalosa sale un camino y a medio kilómetro encontramos esta antigua almazara.
Pulido
Molino de Pulido. Antigua almazara en ruinas, próxima a las localidades de Fuente Palmera, La Herrería y Peñalosa, en la Cañada Hermosa, cuyos antiguos propietarios eran descendientes de Jacobo Hens.
Los molinos escogidos para formar parte de las rutas se ubican en la llamada comarca Valle Medio del Guadalquivir de Córdoba, al oeste de la provincia, limítrofe con Sevilla.
Si bien algunos de estos emblemáticos edificios incluidos en la ruta no están en suelo colono si es cierto que por su inmediata proximidad forman parte de la historia de los aldeanos, de sus costumbres y del paisaje de sus tierras de labranza. La caprichosa línea que delimita el término de La Colonia con sus poblaciones vecinas sitúa algunas de estas antiguas almazaras en Écija, Guadalcázar u Hornachuelos, pero para entender su pasado es necesario ligarlo al de sus habitantes colonos.
La ruta de los molinos vio la luz en el evento Fuente Palmera Fashion Weekend mediante pequeñas publicaciones informativas emitidas por el ayuntamiento local, aunque fue más tarde cuando se presentó oficialmente en la VI Feria de los Municipios de Córdoba el 27 de febrero de 2011, en IFECO, el Recinto Ferial de San Carlos.
El encargado fue D. Francisco Tubío Adame, cronista oficial de Fuente Palmera, quien expuso brevemente su libro-guía La Ruta de los Molinos – un viaje a través de nuestra historia donde se retratan en detalle los senderos trazados para las rutas, sus características, cada uno de los molinos-cortijos que las componen y parte de la historia que los envuelven.